lunes, abril 30, 2007

Confundido

Hoy desperté desorientado y un poco adolorido. No tuve clases.

Bajo al living y me encuentro a mi señora progenitora gritando por teléfono, al poco rato cuelga y lanza un "Putain!" al aire. Me hago a un lado y la evito a toda costa para poder llegar a la cocina en una pieza.

Tengo un vaso de leche en la mano y un croissant añejo en la otra, mi vieja se aparece detrás mío como un fantasma devorador de almas y me dice, tratando de controlar su enojo con alguien más, que Javier me llamó por la mañana. Me pregunta si estamos peleados, le respondo que sí y el teléfono suena.

Mientras mi vieja habla con no-sé-quién, me pregunto que fue de su pretendiente, mi profesor tutor, que por cierto este año ya no lo es, hago memoria, pero no logro siquiera retener su nombre, pues mi cabeza está totalmente destruida por el Huracán Javier.

Escucho a ma mère maldecir al cielo desde la cocina, adónde se llevó el inalámbrico para que yo no escuchara su conversación, la verdad es que tampoco me importa.

Me imagino qué le puedo decir a Javier, trato de sacar palabras, pero sólo termino enrabiándome y yéndome a mi habitación. No sé qué me duele más, si lo que hizo él o lo que hice yo.

Tomo un lápiz del escritorio y escribo bien grande en la portada de mi agenda del colegio "Pédé de merde". Me tiro sobre mi cama desordenada y miro el techo. Desde el principio supe que no había forma de que esto terminara bien.

A N T O I N E

domingo, abril 29, 2007

Nancy boy

2:00 AM Sábado

En la casa del amigo de un amigo, apoyado en la chimenea, un chico X se me acerca.

-¿Estás drogado?- Su pregunta me descoloca un poco, levanto una ceja y me quedo mirándole con cara de pocos amigos. -Perdón... no pensé que te iba a ofender.
-Ajá- Le quito la vista de encima y me fijo en el espectáculo que está haciendo Javier con Muriel; están haciendo una canción de amor a dúo ¿Celoso? Un poco.
-Entonces... Tú eres francés ¿no?- me mira a los ojos. Trato de adivinar lo que pretende, pero no puedo.
-Sí
-¿En serio? Creía que alguien lo había inventado para explicar porque eres tan amanerado- Lo miro de reojo con un poco de enojo, que en realidad es mi manera de decir que eso me causó gracia, este tipo claramente está inventando.
-Te puedo hacer un pregunta ¿verdad?- Asiente con la cabeza- ¿Me estai tirando los corridos?- Me quita la vista y se sonríe.

Aprovecho el intermedio para buscar con la mirada a Javier. Lo diviso subiendo la escalera, seguido de cerca por Muriel ¿Celoso? Mucho.

El chico X me mira nuevamente.

-Entonces...- le digo -¿Qué pretendes conmigo?
-Pasarla bien.... -Dejo mi vaso encima de la repisa de la chimenea y me alejo un poco de el chico X.
-Buena suerte con eso.

Pasó por detrás del sillón donde una pareja se está besando mientras que en la alfombra están jugando cacho, corto camino por la cocina y llego al patio. Prendo un cigarro. Chico X no me sigue, miro hacia arriba y diviso movimiento en la pieza del dueño de casa. Ocupo la escalera que da a la habitación de sus hermanos y llego al segundo piso, apago el cigarro por la parte de afuera de la baranda y lo tiro hacia la fría oscuridad que me rodea, corro el ventanal y entro a la casa nuevamente.

Adentro está agradable, hay estufas prendidas en el primer y en el segundo piso, el frío de afuera es casi insostenible. Doblo a la izquierda, avanzo un par de puertas y entro sin golpear a la habitación donde vi luz antes, la puerta estaba entre abierta.

Ahí están Muriel y Javier, tocándose, besándose, engañándome. Me doy media vuelta y ubico al chico X, todavía en el Living, tratando de tocar guitarra, un chica le pone la mano en las cuerdas y le ayuda a tomar la postura. Ella se ríe de su incompetencia. Chico X también se rie y dice que se sabe una canción, empiza a rasguear las cuerdas cuando suena el celular de ella; se disculpa y se aleja un poco para arrancar de la creciente bulla, el dueño de casa y su polola están poniendo música en el estéreo a un volumen nada agradable.

Chico X me mira, yo lo miro, nos miramos. Deja la guitarra en el suelo y se pone de pie, me escudriña con la mirada, me desviste con sus enormes ojos. Le hago una seña para que me siga y después de recoger una botella de vodka del bar, nos encerramos en el baño de la pieza de invitados.

20 o 30 minutos después mi celular vibra en mi bolsillo derecho, chico X también lo siente y me mira con cara inquisitiva.

-¿Vas a responder?
-No es nadie importante- le respondo, a sabiendas de que el visor de la pantalla dice "Javi".

Acto seguido él desliza su mano por dentro de mis bóxers y me olvido total y completamente de lo que estoy haciendo, sólo me dejo llevar.

A N T O I N E

domingo, abril 22, 2007

Dans la lumière froide du matin

Estoy loco, me estoy volviendo loco, pero no de estrés, si no que de celos.

Resulta que a Javier le gusta Muriel, que es la niña que viene de Inglaterra y le caigo mal de presencia, bueno ya no tanto, la mina es bien dulce y "livianita de sangre", pero aún así no nos llevamos mucho y qué como sé que le gusta, porque no soy ciego ni tonto.

No sé que hacer con eso, de hecho tuvimos una discusión bien tonta y desde ese momento que no nos hablamos, como hace 3 días.

Le pregunté si me iba a acompañar a buscar unos libros y él me dijo que no porque iba a estudiar con Muriel, le dije que se podía ir a donde quisiera con su "amiguita" y luego nos mandámos a la cresta mutuamente.

Se supone que tenemos que entregar un trabajo para mañana en Historia, pero no creo que él lo haya hecho y lo que yo alcancé a hacer no da ni para un 2.0, me da más lata por su nota que por la mía. Más encima puede que me cambien de colegio, mi mamá no está muy segura de eso aún, es que está enojada conmigo porque hace poco me pidió explícitamente que no invitara a Javier cuando ella no estuviera y un día que llegó más temprano porque no tuvo reunión nos pilló durmiendo en el sofá del living con la tele prendida. No me dijo nada mientras él estaba allí, Javier inventó una excusa y se fue, y yo, por el contrario me quedé esperándo el reto y acá estoy, todavía esperando, no me ha retado, pero sí me ha arrugado el ceño desde la semana pasada ya, ahora no importa cuantas cremas anti-arrugas se eche, esa no se le va a borrar nunca.

Y sobre todo eso de Muriel, ya no es una pelirroja del infierno, ahora es una rubia del infierno y por Zeus que la debilidad de Javier (como la mía) son las rubias.

A N T O I N E