Reste là
Si posteo tarde mal y nunca, no es porque no quiera, es porque no tengo tiempo. El tiempo de merde se me escapa entre los dedos como un líquido cualquiera, se disuelve como el azúcar en el té y se disipa como el humo contra el viento.
Entre las pruebas, las discusiones y las sesiones de estudio apenas me quedan un par de segundos para mirarme al espejo antes de salir, más que en un acto de vanidad, en un intento de asegurarme que llevo ropa puesta y no voy desnudo por la vida, no es que me moleste la desnudez propia o ajena; más bien dudo que a alguien le agrade la mía.
Pero basta de pavadas, un pequeño resumen de estas últimas dos semanas.
Hasta el pescuezo de pruebas, tratando de engañar al diablo para que me vaya bien en los finales, medio estresado, medio dormido, medio dopado, medio reventado; si sumamos los medios estoy seguro que obtendremos más de un Antoine y puede que eso sea tanto útil como innecesario.
Mi madre al final no se enojó por todo el asuntillo del maquillaje, a estas alturas ella está acostumbrada a que a mi me bajen las ganas de ponerme aritos, vestidos y otras tonteras que aquí no son de hombre, pero en mi mundo (y en el de ella), da lo mismo. Lo que le molestó fue que la llamaran al trabajo por una tontera como esta, así que al día siguiente, como ella no tenía clases, me llevó personalmente al colegio y pidió conferencia con el inspector correspondiente; le dio un par de "tips" sobre como hacer su trabajo y recalcó que si era tan importante que los alumnos no fuesen con maquillaje al colegio tal vez deberían ponerlo en la normativa, se podrán imaginar que eso no cayó muy bien, a nadie le gusta que le digan qué hacer ni como hacerlo y mi vieja es experta en eso. Todo terminó con una nota de anti-discriminación cuando dijo que si el rimel fuese tan problemático, tal vez deberían haber más personas en problemas por tamaña estupidez, ya que, y cito a mi señora madre, "cuando pasaba de recepción hasta acá me topé con al menos 6 señoritas que tenían rimel como arañas trpando por sus mejillas ¿por qué no veo que estén llamando a sus padres, ni regañándolas a ellas para que vayan a sacarse el maquillaje? ¿ah? ¿no será que esto tiene más que ver con que Antoine, siendo un hombre, tenga maquillaje?", después agregó que en todo caso nosotros ya habíamos discutido sobre esto en la casa y yo no volvería a ir al colegio, en horario de clases, con delineador, rimel ni nada por el estilo, pero no porque fuese algo malo, si no porque obviamente los inspectores se sentían atraídos a mi como la abeja al polen y no se preocupaban de lo que en verdad importa; justo en ese momento se armó una pelea en el patio y mi señora madre apuntó por la ventanilla con cara de "ese es su trabajo, no el mío" y se fue. Tengo que aceptarlo, mi vieja y yo no nos llevamos mucho, pero es la mejor cuando este tipo de injusticias suceden. Qué horrible ¡¡Creo que estoy madurando!! (Muerte lenta y dolorosa al idiota que se le ocurra felicitarme por esto).
Entre otras noticias, a mi profe de lenguaje y comunicación (me agradaba más cuando era *sólo* castellano), se le ocurrió que escribiésemos un cuento corto para el final del trimestre a modo de "nota de respaldo", si las notas no nos dejan muy bien parados, el cuento nos entregará un par de décimas dependiendo de que tan bien hecho esté. No se me ocurre nada que escribir, estoy seco de ideas, así que acepto sugerencias, en serio, las acepto, sin "peros" y sin frases sarcásticas ni hóstiles. Desde ya gracias.
A N T O I N E
PS: Hace un tiempo atrás me dijeron que era un poco hóstil con el par de mortales que se habían atrevido a comentar, lo lamento, a veces se me olvida que mi intesidad es un poco demasiada y tiende a perderse en las fronteras de la hostilidad y la belicosidad. Si algún lector (asumiendo que alguien aparte de Ice me lee), se ha sentido alguna vez herido por mis palabras, lo lamento, os juro que no era mi intención (Dios, estoy pidiendo disculpas t e n g o que estar madurando, no me agrada esa sensación).